Ver las listas de los anuncios mejor recibidos en Estados Unidos, analizar la publicidad que nos rodea y ver qué es lo que se está viendo en Reino Unido permite tener una panorámica de la Navidad y de su publicidad y comprender qué es lo que los consumidores valoran. De ver y analizar todos esos anuncios se pueden extraer ciertas conclusiones sobre cuáles son las tendencias que dominan la parrilla publicitaria navideña.
Si el feel good importa fuera de temporada, más en Navidad
Una de las tendencias que han marcado muchas cosas, desde los productos que triunfan a los mensajes que lanzan las marcas, es el feel good (su peso es tal que incluso se ha convertido en una suerte de corriente literaria). Se buscan mensajes optimistas, buenrrollistas, que tengan un final feliz asegurado y en el que los protagonistas de la historia se sientan recompensados. El espectador/receptor tiene que sentirse igualmente emocionalmente recompensado y tiene que conectar con la historia.
En parte, esto viene muy marcado porque los consumidores quieren que las marcas los hagan felices y no simplemente que les vendan cosas. Por otro lado, estos mensajes parecen especialmente auténticos. Todo ello hace que se sucedan los anuncios que usan historias felices y sentimentales, buenrrollistas, para llegar al público. Obviamente, la Navidad no iba a quedarse fuera de ello.
Los pequeños cuentos de hadas conectan con la audiencia
Si algo se ha visto a lo largo de las diferentes campañas de Navidad es que a los consumidores les gustan esas historias que tienen una suerte de toque mágico, ya sea porque tienen una especie de atmósfera onírica digna de la fantasía (y no hay más que pensar en los virales de los últimos años para comprenderlo) o ya sea porque lo que nos está narrando es una suerte de relato, una especie de cuento de hadas. La estructura se ha repetido viral y viral de anuncio navideño año tras año y no iba a desaparecer en la campaña de 2016.
Los animales siempre funcionan
Los animales protagonizan muchas de esas historias emocionantes y sensibleras y muchos de esos relatos que se cuelan en las listas de los anuncios más vistos y más compartidos. Lo llevan haciendo posiblemente de forma recurrente durante los últimos años. Los animales son fáciles de recordar y se pueden amoldar a lo que la marca realmente quiera contar y como quiera hacerlo. Además, es difícil que tengan connotaciones negativas y suelen tener una aprobación casi universal. A los consumidores les gustan y conectan rápidamente con ellos, como demuestran muchos de los anuncios virales de los últimos años (ahí está Puppy Love, por ejemplo). Los animales, por supuesto, son una tendencia siempre constante en los anuncios más populares de la Navidad.
Las marcas quieren hacernos llorar
¿Por qué los anuncios de la Lotería de Navidad llevan años empeñados en que lloremos como magdalenas ante los minutos de historia que tenemos delante? Tiene por supuesto una clara explicación. Los anuncios lacrimógenos están conectando muy bien con la audiencia en los últimos tiempos y están consiguiendo sus objetivos. Están logrando no solo muy buena respuesta sino también que logremos recordar muy bien a la marca en cuestión. Llorar es por tanto una tendencia soterrada que se puede encontrar en casi toda la publicidad navideña.
Lo importante es la familia
Incontables anuncios echan mano de este recurso temático, a pesar de que ya está más que visto. Se lleva volviendo a casa por Navidad desde posiblemente antes de que nos trajesen los de turrones El Almendro. Se podría meter aquí una variante que es la de no solo la importancia de la familia sino también la importancia de sentir que todos estamos unidos (el anuncio de Apple de Navidad de este año es un gran ejemplo). Nadie debe ser un outsider en Navidad.
Y nunca está de más echar mano de la animación
Muchas de estas historias se narran echando mano de la animación, que se ha convertido en el recurso perfecto para contar cualquier tipo de historia. La animación le da un aire mucho más naif y mucho más entrañable, lo que hace que se convierta en un recurso muy eficiente para lograr la atmósfera navideña.
Fuente: www.puromarketing.com